En este blog hemos comentado varios spots que muestran la conveniencia de moderar el uso de las nuevas tecnologías. La campaña "Desconectar para conectar" mostraba un mundo lleno de aparatos tecnológicos, una vida llena de intercpmunicaciones... y de seres humanos incomunicados. Y "Look up", el vídeo de un profesor de antropología, animaba a levantar la vista (del teléfono móvil) para ser capaces de mirar el mundo que nos rodea: las personas, la familia, los verdaderos amigos.
El problema, como sabemos, se agudiza en el contexto de la comunicación familiar. Muchos padres y madres han experimentado en sus carnes lo difícil que es reunir a los hijos para la cena cuando están concentrados en sus smartphones, en sus tablets, o viendo una serie en el televisor.
Dolmio, una empresa australiana de salsas para pasta, ha decidido poner remedio a esta situación. Para ello han creado un curioso pimentero que, con un simple giro, apaga todos los dispositivos electrónicos en varios metros a la redonda. Convencidos del éxito que tendría, lo regalaron a varias madres australianas y grabaron las reacciones con cámara oculta. El resultado fue mucho más eficaz y sorprendente que el que habían esperado. Las reacciones iniciales fueron explosivas, sobre todo en los adolescentes ("¡¡¡Se ha desconfigurado mi smartphone!!! ¡Estoy perdida...!"). Pero, casi inmediatamente, las comidas empezaron a ser gratas y enriquecedoras reuniones familiares donde todos tenían algo que contar, y todos aprendían también a escuchar a los demás.
Esta campaña ha requerido el trabajo conjunto de varias agencias: Clemenger BBDO Sydney, Pollen, Starcom y Ogilvy PR. El resultado es este divertido vídeo, que retrata la situación de muchas familias -no sólo las australianas- y que deja patente el problema de comunicación que existe en muchas casas. ¡Cuántas madres quisieran hacerse con un pimentero así...!
Dolmio, una empresa australiana de salsas para pasta, ha decidido poner remedio a esta situación. Para ello han creado un curioso pimentero que, con un simple giro, apaga todos los dispositivos electrónicos en varios metros a la redonda. Convencidos del éxito que tendría, lo regalaron a varias madres australianas y grabaron las reacciones con cámara oculta. El resultado fue mucho más eficaz y sorprendente que el que habían esperado. Las reacciones iniciales fueron explosivas, sobre todo en los adolescentes ("¡¡¡Se ha desconfigurado mi smartphone!!! ¡Estoy perdida...!"). Pero, casi inmediatamente, las comidas empezaron a ser gratas y enriquecedoras reuniones familiares donde todos tenían algo que contar, y todos aprendían también a escuchar a los demás.
Esta campaña ha requerido el trabajo conjunto de varias agencias: Clemenger BBDO Sydney, Pollen, Starcom y Ogilvy PR. El resultado es este divertido vídeo, que retrata la situación de muchas familias -no sólo las australianas- y que deja patente el problema de comunicación que existe en muchas casas. ¡Cuántas madres quisieran hacerse con un pimentero así...!
No hay comentarios:
Publicar un comentario