domingo, 26 de octubre de 2014

Gran Spot de Audi: "Siempre seremos novatos"


Este fin de semana se ha jugado el clásico de la liga española: Real Madrid – Barcelona. Para ese encuentro de los dos gigantes del fútbol español, Audi ha realizado una película especialmente inspiradora. La cinta pone de relieve los valores que esa marca comparte con los dos equipos; y, sorprendentemente, no habla de tradición, ni de grandeza, ni de triunfos. Habla del espíritu y la ilusión de los “novatos”: esos chavales esforzados, llenos de ilusión y optimismo, que trabajan en la cantera preparándose para el futuro. Su afán de superación, su inocencia, sus ganas de mejorar, su espíritu de equipo… son valores que todos podemos reconocer y aplaudir en ellos.

El vídeo recoge en esencia una personalidad única, un carácter semejante. Las imágenes que vemos y la voz en off que sustenta la historia nos hablan de valores que debemos mantener siempre, por muy lejos que hayamos llegado. Al principio, vemos la lucha, el valor, la pasión, la osadía, las esperanzas y los sueños de unos jovencísimos futbolistas, que se enfrentan a sí mismos para llegar a lo más alto. Después vemos a los veteranos, y en ellos descubrimos el mismo espíritu: “Somos novatos. No conocemos los caminos, ni las reglas. Solo tenemos ilusión”. Ese es el mensaje de Audi.

La relación de esta marca con ambos clubes viene de lejos. Desde hace una década es patrocinador oficial del Real Madrid C.F., y desde hace siete años, lo es también del club azulgrana. Este doble patrocinio le permite hacer anuncios como éste, que preparan el espíritu de los espectadores ante al clásico enfrentamiento de los dos equipos.

Para vencer, es necesario luchar y sufrir. Recomenzar siempre, estar siempre aprendiendo. Y esto también cuando ha pasado la juventud, incluso aunque peinemos canas. Siempre necesitaremos, en nuestra vida, el espíritu de los “novatos”.

domingo, 19 de octubre de 2014

El niño que hablaba con los bebés

Danone nos ha emocionado con su campaña Alimenta sonrisas. En línea con spots anteriores, apuesta de nuevo por comunicar emociones y transmitir optimismo. El fondo del anuncio es la crisis; el primer plano, la infancia. Sobre estos dos elementos, aparentemente opuestos, imagina un diálogo precioso.

Un chaval travieso y avispado, de buen corazón, se dirige a la prominente barriga de su madre, embarazada de 6 ó 7 meses. Armado de inocencia y de bondad, se siente capaz de transmitir esperanza a su futuro hermanito: “Hola, soy yo. ¿Cómo va por ahí dentro? Por aquí toda la gente habla de la crisis. Cuando conozcas a papá y a mamá los vas a ver muy raros. No son así. Es que están preocupados...

Entonces surge en él esa vena de espontánea generosidad que tan frecuentemente aflora en el corazón de un niño: “Pero, ¿sabes qué? Yo quiero que vengas. Y quiero que juguemos juntos. Y tengo, ¡muchas cosas para ti…!

Amor, amor de niño. Ese es el secreto para vencer todas las crisis: las económicas, las personales y las familiares. Los niños lo tienen muy fácil para no perder nunca la sonrisa. Les basta con su natural honestidad y su alegría a raudales. A nosotros, los que aún no sabemos hablar a los bebés, nos resulta mucho más difícil. Necesitamos aprender la difícil lección de la humildad, del deseo de compartir, del gozo inmenso al poder ayudar a otro. Ellos saben muy bien que la felicidad está en los pequeños detalles. Nosotros estamos aún lejos de aprenderlo.

Con todo, lo más hermoso del anuncio es ese amor al hermanito no nacido. Los niños aman la vida: la aman con pasión, mucho antes de que vea la luz. Y son capaces de dialogar con ella. Por eso sólo ellos, y también sus madres, son capaces de hablar con los bebés.

Ojalá volviéramos a ser niños.

domingo, 12 de octubre de 2014

Belleza y autoestima: un legado de las madres a sus hijas

Mi amigo Pablo Mir, de la agencia Planilunio, me envía esta campaña que acaba de lanzar Dove. Ciertamente, si tuviéramos que hablar de consistencia en la comunicación, Dove es un ejemplo maravilloso. Desde que en 2004 lanzara el eslogan “Por la belleza real”, ya comentado en este blog, la empresa se ha dedicado a generar campañas que incrementen la autoestima de las mujeres. El resultado es obvio: se trata de una de las marcas mejor posicionadas en torno a esa idea.

Pero ser consistente, aun siendo un primer paso, no basta para generar engagement, es decir, empatía con nuestro público objetivo. Y Dove sí lo ha conseguido. ¿Cómo? La respuesta es que sus mensajes no buscan vender, sino conectar. Sus campañas no hablan de los atributos y las ventajas de sus jabones, ni tampoco de algo tan básico como el precio. Su táctica es: crear confianza en su público.

Un ejemplo lo tenemos en su más reciente trabajo (“Legado”) , en el que lanzan una pregunta interesante: ¿Los sentimientos hacia la belleza nacen o se transmiten? La investigación de Dove muestra que el 71% de las niñas se sienten presionadas para tener una apariencia hermosa, y reconocen la sensación agobiante de ser juzgadas por su aspecto físico desde temprana edad. A la vez, la compañía ha comprobado que las niñas se sienten menos presionadas y más libres cuando tienen un modelo positivo a seguir; y también, que las niñas tienen en su vida un promedio de tres mujeres que admiran, y más de la mitad identifican a su madre como el modelo número uno.

Con estos datos en la mano, la marca creó este nuevo vídeo con un claro objetivo: sensibilizar a las madres para que transmitan a sus hijas un legado de belleza positivo. Tanto las madres como las hijas que aquí aparecen, fueron invitadas a escribir un listado: lo que les gusta y no les gusta de su cuerpo. El resultado fue que la lista de las hijas era extremadamente similar a la de sus madres, lo que demostraba la implícita sintonía de éstas con sus madres. La conclusión es que los sentimientos sobre la belleza y la autoestima se pueden transmitir.

En apoyo a estos mensajes, Dove ha llevado a cabo acciones sociales de largo alcance. Su “Proyecto para la Autoestima” ofrece educación para las jóvenes de 7 a 17 años a través de clases en los colegios, actividades para los docentes, y recursos online para padres y educadores. Con esas acciones ha llegado ya a más de 13 millones de jóvenes en todo el mundo. Un auténtico “legado” que muestra el compromiso de una marca con el público al que se dirige.

domingo, 5 de octubre de 2014

Amar al otro con sus defectos

Amar a otra persona supone quererle como es, con sus cualidades y con sus defectos. Y esto, que es decisivo en la amistad, es mucho más importante cuando esa persona es nuestra mujer, nuestro marido: aquel ser increíble y maravilloso con el que deseamos compartir la vida entera.

El noviazgo fue, sin duda, algo inolvidable. Y también los primeros meses del matrimonio. Pero luego, con el paso del tiempo, empiezan a percibirse con claridad las pequeñas deficiencias del cónyuge. En este anuncio que me manda Mauricio Artieda, seguidor del blog, se muestran algunos defectos que podríamos calificar "de pequeña importancia". La mujer que nunca deja el asiento del coche en su sitio, una vez que lo ha utilizado. El marido descuidado que mancha la tapicería del salón cuando come viendo la tele. La esposa que hace siempre una maleta inmensa cuando viaje sólo un par de días. Y el esposo que se lava los dientes en la cocina, mientras hojea distraídamente un libro.

No podemos perder los nervios porque -un día y otro- nuestra pareja cometa el mismo error de siempre, ese que le hemos señalado una y otra vez. Entre otras cosas, porque también tiene sus virtudes: tenemos que procurar recordarlas cuando vemos claramente sus defectos. Y también, por dos cosas más: porque le amamos y porque esa persona nos ama.

En el spot, todo es visto con inmensa comprensión: porque la música dulcifica cada pequeño desastre, cada defecto como algo disculpable y sin importancia. Y, sobre todo, está la mirada del otro. Esa mirada alegre y enamorada -lo más precioso del spot- que es lo que permite comprender y amar al otro con sus defectos, y decir siempre: "Sí, quiero".