lunes, 23 de mayo de 2016

¡Mi hermano gana en Cannes la Palma de Oro al mejor corto de ficción!

La carrera de mi hermano Arturo como productor de cine es impresionante: con “El barco pirata” ganó el Goya al mejor corto de ficción en 2012; con “La historia de siempre” obtuvo más de 130 premios en todo el mundo: Lucania (Italia), México D.F., Montecatini (Italia), Seattle (U.S.A.), etc.; y con “El corredor”, logró el Premio en la SEMINCI 2014, el Premio Gaudí en 2015 y el Goya al mejor corto en 2015 también. A ese palmarés suma, desde anoche, la Palma de Oro en Cannes al mejor cortometraje por “Timecode”, dirigido por Juanjo Giménez y producido por él.

Timecode” es la primera Palma de Oro para un cortometraje español, y la segunda Palma para el cine español en toda su historia, tras la conseguida por Luis Buñuel con ‘Viridiana’, hace ya más de medio siglo. Es un corto muy original, en el que se mezcla el misterio y la danza, la belleza y el amor. Luna, una vigilante de seguridad que trabaja en el parking de unas oficinas durante el día, se turna todos los días con Diego, que cubre las horas de la noche. Solo se ven unos segundos cada doce horas, en el momento en que, sin mediar palabra, se entregan el testigo para intercambiar el turno. Así jornada tras jornada. Un día, cansada de su trabajo y de su jefe, Luna descubre en las grabaciones de la noche anterior la pasión de Diego por la danza, y eso despierta en ella una ilusión dormida durante años...

Juanjo Giménez, que ha realizado tres largos y casi una veintena de cortos, defendió en la rueda de prensa el valor del cortometraje como formato propio: “Es posible tener una carrera en el cine sin hacer largometrajes. Mi próximo proyecto será también un cortometraje, considero que el corto es el presente y el futuro”. El director estaba visiblemente emocionado tras recibir el premio. En su discurso, dio las gracias al Festival antes de declarar: “Luis Buñuel, tú tienes la grande, pero yo tengo la pequeña, ¡que es todavía más difícil de lograr!”.

En verdad, no es un triunfo pequeño. Este año el comité de selección tuvo que revisar un total de 5.008 cortometrajes para seleccionar los diez finalistas. Y de ellos, el vencedor ha sido “Timecode. ¡Enhorabuena a todo el equipo, y en especial a Arturo! Qué orgulloso me siento de ser su hermano mayor. Os dejo con el trailer de esta pequeña joya.

lunes, 16 de mayo de 2016

Spot emocional: ¡Es maravilloso ser padres...!

En este spot, Coca-Cola nos regala una sonrisa, nos cuenta una bella historia y nos habla del amor a la familia. Todo en uno. Y lo consigue en menos de un minuto y en un maravilloso viaje en el tiempo que nos hace pensar: “En verdad, ¡qué poco hemos cambiado!”.

Sabíamos que esta marca de bebidas refrescantes ha defendido siempre una publicidad con valores, y que el amor a la familia ha sido uno de sus valores más recurrentes. Ahora nos muestra que, en ese contexto, el momento de la paternidad y de la maternidad es el más maravilloso de todos, el que supone la más grande realización personal y la auténtica maduración de la persona.

Este anuncio, titulado “Life” en unos países y “Ser padres” en otros, compagina perfectamente estas dos facetas: porque es, en efecto, un canto a la vida; y, al mismo tiempo, un emotivo homenaje a los padres. Sobre todo, a los padres primerizos: a esos padres jóvenes que, llenos de inquietud pero a la vez de alegría, se atreven –en los tiempos que corren- a tener hijos y a darles lo mejor de sí mismos.

La historia arranca en los felices 70. La imagen nos lo muestra, y la canción de fondo (la clásica "To love somebody" de los Bee Gees, de 1967) nos introduce también en la época. Una mujer temblorosa anuncia a su marido que van a ser padres. Él la besa emocionado: es un momento de plenitud. Tras la euforia inicial, asistimos a una catarata de situaciones no previstas que cambian por completo la vida de ese matrimonio: la casa “absorbida” por el nuevo inquilino, los lloros del crío durante la noche, los paseos en los que ya no se puede hacer jogging, los desastres de la criatura… En definitiva, no tener un momento para uno mismo.

Y, de repente, otra noticia increíble. La cámara nos muestra la cambiante expresión del padre ¿Sorpresa, angustia, temor? ¡Todo lo contrario! Y el final, tan expresivo y tan conmovedor, nos deja una profunda y tierna emoción: “¡Es maravilloso ser padres!”.

sábado, 14 de mayo de 2016

Homenaje de los cineastas a "Ciudadano Kane" en su 75 aniversario

Entre el 1 y el 8 de mayo de 1946 se estrenó en Nueva York, Chicago y Los Angeles una película verdaderamente original: Citizen Kane (1941), opera prima de un jovencísimo Orson Welles (25 años) que revolucionaría el arte cinematográfico.

Se cumple en estos días el 75 aniversario de aquel estreno. Y todavía muchos críticos, teóricos e historiadores la consideran como la película más grande de todos los tiempos. A pesar de su antigüedad, el filme sigue siendo una obra de referencia para todos los amantes del Séptimo Arte. Con el tiempo, la película –escrita por el propio Welles y el guionista Herman J. Mankiewicz– ha sido fuente de inspiración para cineastas de diversas generaciones, como Steven Spielberg, Ridley Scott, Wes Craven, Martin Scorsese, Woody Allen, Tim Burton, los hermanos Coen, Quentin Tarantino, David Fincher, Wes Anderson y Christopher Nolan, entre otros.

En este pequeño vídeo (1’ 30”), titulado Citizen Kane: A Tribute From the Movies, editado brillantemente por Jacob T. Swinney, vemos una selección de escenas de la cinta que evidencian cómo los cineastas han retomado el filme de Welles para rendirle homenaje. No en vano, se trata de una película que ha llegado a ser emblemática del cine estadounidense sobre las glorias y las trampas del sueño americano. Un regalo para todos los amantes del cine clásico.

lunes, 9 de mayo de 2016

"El otro nacimiento": la otra maternidad

Hace 8 días celebramos en casi todo el mundo el Día de la Madre. Con tal motivo, pudimos ver algunos spots que ponían de relieve aspectos maravillosos de la maternidad; aspectos que a veces olvidamos, pero que encierran siempre un tesoro de cariño, de ternura, de generosidad.

Uno de los más sorprendentes fue el anuncio de la marca Nido, titulado "Descubre el otro nacimiento", que fue realizado por la Agencia de Publicidad McCann de Santiago de Chile.

El vídeo habla sobre la maternidad, pero de una forma diferente y en una situación distinta. En él se puede ver la emoción de una madre que aguarda la llegada de un hijo, la alegría que se siente durante la espera, el cariño que se pone en cada paso. Hasta que llega el momento tan anhelado de su llegada. Cuando la historia llega a su punto más álgido, da un giro inesperado y nos sorprende… No esperábamos esa salida, y, sin embargo, el desenlace nos cautiva y nos proporciona una enseñanza muy importante. Y es que la maternidad va más allá de lo que conocemos, por eso nos conmueve el momento en que los padres reciben… a su hijo en adopción.

El mensaje que cierra este relato (otro buen ejemplo de storytelling) es que "ser mamá es algo que crece con el corazón". Un cierre que invita a reflexionar sobre esta hermosa capacidad de acoger la vida: un acto de generosidad que siempre ha tenido muchas maneras de manifestarse en la vida de un matrimonio. Desde luego, una forma estupenda de felicitar a todas las madres.

"Mayo de 1940": Caravana hacia la libertad

(JUAN JESÚS DE CÓZAR) El director francés Christian Carion ya nos sorprendió gratamente en 2005 con “Feliz Navidad”, una cinta antibelicista basada en un suceso real ocurrido al comienzo de la Primera Guerra Mundial: la tregua no oficial que permitió a soldados franceses y británicos celebrar la Nochebuena de 1914 junto a sus enemigos alemanes. Una decisión insólita tomada por los jefes inmediatos de las compañías, que provocó gran enfado en los niveles superiores de los ejércitos.

Diez años después Carion ‘vuelve a las andadas’ con “Mayo de 1940”, otra entrañable película en tiempos de guerra que se estrenó el pasado 6 de mayo en las pantallas españolas. En esta ocasión el director sitúa la acción en 1940 y centra su atención en uno de los mayores éxodos del siglo XX, cuando 8 millones de franceses abandonaron sus hogares huyendo del avance del ejército alemán. Una de esas personas desplazadas –niña entonces– será años más tarde la madre de Carión, a quien su hijo dedica el film.

Apoyándose en fotografías y filmaciones de la época y en los testimonios de su madre, el director galo –también coguionista– logra recrear con gran realismo las condiciones materiales y el ambiente humano esa dolorosa marcha. Además, introduce una trama de ficción que facilita una mayor implicación emocional en el espectador: la odisea de Hans (August Diehl), opositor al gobierno de Hitler, y su hijo Max (Joshio Marlon) de 8 años, que debieron huir precipitadamente de Alemania en 1939 con dirección a Francia. La sensible y melancólica música del octogenario Ennio Morricone es otra contribución técnica que acredita la calidad de la cinta.

Se nota el esfuerzo de Carion por entregarnos una película ‘casi’ familiar porque, aunque no puede ocultar el drama y la violencia que supusieron la ocupación nazi, emplea diversos recursos –elipsis, encuadres lejanos, etc.– para no regodearse en esos aspectos. Y así, junto a escenas impactantes como el bombardeo de los Stuckas o la aparición de los Panzer surcando los campos de maíz, sabe dotar al film de una grandísima humanidad, a través de una galería de personajes que brillan por su generosidad: el alcalde Paul (Olivier Gourmet), su mujer Mado (Mathilde Seigner), la señorita Suzanne (Alice Isaaz) –representantes ambas de un atractivo feminismo, el oficial escocés (Matthew Rhys), los inocentes niños…

La guerra –viene a decirnos de nuevo Carion, ese monstruo engendrado siempre por unos cuantos malvados, nunca podrá agotar la sobreabundancia de bondad que atesora el corazón humano; una sobreabundancia que es también un motivo de esperanza para alcanzar y extender la paz.

domingo, 1 de mayo de 2016

Spot para el Día de la Madre: "Referencias"

Hoy es el Día de la Madre, y he pensado que la mejor manera de celebrarlo es recordar este spot. Es bastante conocido: recibió numerosos premios, tuvo versiones distintas en cada país y ha sido muy comentado en Internet.

La historia se resuelve en dos secuencias. En la primera, una madre de familia llega a casa con sensación de derrota: ha realizado una entrevista de trabajo y no ha conseguido el puesto por falta de referencias. En la segunda, el hijo se vuelve hacia la cámara y empieza a recordar todo lo que debe a su madre:

Nací en 1986. Desde entonces, todos en casa le hemos creado unas ojeras que no oculta... Su carrera se ha basado en la persuasión: ¡me convenció de que las verduras me pondrían los ojos verdes! Imaginación no le falta, no…

En ese momento, la confidencia se hace más íntima, más entrañable y amorosa: “La llamas y está. ¡Siempre está! Por eso no me he convertido en el imbécil que podría llegar a ser… Le saca partido a todo, es un genio. Debería darle las gracias a mi padre por haberla elegido”.

Sólo entonces nos damos cuenta de que el chico está delante del empleador y está relatando esas referencias que antes le faltaban. Por eso añade: “Yo creo que son buenas referencias, ¿no?”. Y, cuando ya se marcha, pensando que al menos ha podido decir algo bueno de su madre, nos sorprende la respuesta del ejecutivo: “Lo son. Quiero tenerla aquí. La respuesta del chico es aún más sorprendente…

Este es un anuncio que roza la perfección. Cada vez que lo veo me sonrío y aprecio tantos detalles de mi madre que consideraba normales… Y que ahora, con el paso de los años, me doy cuenta de que han sido el apoyo de mi felicidad.

Hoy en día, que las teleseries nos muestran a tantos adolescentes enfrentados a sus padres, es un buen momento para mostrar este anuncio a tantos jóvenes olvidadizos. Yo lo hice el año pasado, en el último día de clase. Y una alumna me dijo al salir: “Ha sido el mejor anuncio que hemos visto este curso: me ha hecho descubrir el cariño que mi madre ha puesto, durante años, en tantas cosas pequeñas. Gracias por ponerlo precisamente hoy...”.